25/10/13

mirando el futuro con tus ojos


Hay días donde uno parece correr, pero en realidad afronta desafíos y responsabilidades,
de esos que bañan todo de una aspiración más que superadora.
Pero también hay mañanas donde las imágenes traen a las palabras.
El 20 de Octubre del 2010 caminaba por el pasillo de un galpón,
empaquetando y pensando que en ese galpón había visto a compañeras llorar,
irse despedidas por no llegar a la producción, las vi pensando con lágrimas en los ojos
si mañana tendrían la posibilidad de mantener a sus hijos.
Solas,jóvenes trabajadoras,precarizadas,oprimidas, pero con la fuerza necesaria
para cambiar la realidad si se lo proponían, si podía esperar el momento adecuado
para debatir de las ideas de cambiar nuestra realidad y la de miles de mujeres.
Esa era la perspectiva.
Ya a mitad de la jornada,cansada, el teléfono no paro de vibrar,
aproveche una de las pocas ocasiones de ir al baño,
miré los mensajes.
El negro me decía "Todos a callao y corrientes, hoy asesinaron a un compañeros del Partido Obrero en el corte de vías de los tercerizados".
No pude hacer más que tomarme más de esos tres minutos permitidos,
lloré de odio, de odio de clase.
Perdimos un compañero, pero profundizamos su lucha.
Aumentaron los deseos de tomar el cielo por asalto.
Seguí caminando por ese pasillo empaquetando,
no alcanzaron los tres minutos para derramar las lágrimas que brotaban de mis ojos.
De ahí cambio mucho, cambió todo, se profundizaron las convicciones.
Soy parte de una juventud que dio luchas políticas por la cárcel a  los responsables
intelectuales y materiales de ese crimen perpetuado en contra de todos los que nos organizábamos, trabajadores y estudiantes.
Vi llorar a Adriana en los plenarios, leí a Pablo jurar en la tumba de Mariano vengar su muerte, vi a Magui cantar en contra de la burocracia sindical en las concentraciones.
Con ese mismo odio, ese odio de clase, esas convicciones que se profundizaban lo inundaban todo, la hacían mas fuerte, había una razón más para vencer.
Hoy después estos tres años paro un segundo y veo todas las luchas que dimos,
las tuyas, las nuestras, las mismas de Marino, la mismas de los jóvenes que enfrentamos a las patronales explotadoras, a las policías bravas que matan a los pibes en los barrios,
al gobierno que hablaba de derechos humanos, mientras asesinaban a Mariano.
La de esa militancia carrerista de soldados del patrón, que hablaba de militancia en nombre del cambio, pero nada tienen que ver con la lucha de los trabajadores.
La que se para al lado de las patotas que atacan a los trabajadores, del lado de los que nos niegan el aborto,libre,seguro y gratuito, el derecho a una educación sexual laica en las escuelas, las del papa peronista cómplice de la dictadura militar.
 Que están bien unidos y organizados para que no luchemos y no ganemos nada.Para sostener una realidad de miseria,explotación y opresión.
No solo recuperamos murales, revitalizamos tu recuerdo en cada jornada de lucha.
Vemos el futuro de la mano de poner todo de nosotros para llegar a la victoria, por un gobierno de los trabajadores, sin patronales amigas del gobierno, sin gobiernos que digan que los asesinos son modelos de conducción sindical.
Nació Mariano, y para las luchadoras como mi camarada Gabriela Campos que luchó ferreamente en ese pase a planta es un también la forma de ver que hay un futuro de la mano de miles de jóvenes que vienen y vendrán.
Vamos por ellos!!! Vamos por una gran juventud revolucionaria!!!
Vamos por vos y todos nuestros mártires.
"La vida es hermosa. Que las futuras generaciones la libren de todo mal, opresión y violencia y la disfruten plenamente."

Mariano Ferreyra presente ahora y siempre!!!

Clara Liz

21/10/13

Como un poeta de 1900 ( II )

No quiero caer en especulaciones de lo que no fue,
dijo ella por dentro.
Hay historias que son sabidas, aún sin contarlas desde que no han empezado,
hoy pega la nostalgia de algunas canciones, de ver tu soledad justificada.
Quien espera tantas noche de atención?
De esas que clavan la mirada en los intereses lejanos,
de discos que ya había escuchado pero sonaban distintos en tu compañía.
Hoy es domingo, y se parece mucho a ese lunes,
ese donde descubrí que ahí estabas,
desinteresado al final, y donde todo se perdía.
Como en una tosquera, se hundía todo el cariño y la frágil presencia,
la que ríe de tu imaginación e inocencias tan perfectas.
Es asi que confirme una vez más que a veces hay despedidas,
no verbales, sino de esas que solo te alejan.
Y duelen.
Que mas puedo decir? Oi de tus historias, de aquella dolorosa pérdida,
di lo que pude, sostuve más de lo que pensé que se debía.
Noches de juegos que no entendía, pero admire por su arte.
Vi ventanas que mostraban un cielo que nada tenían que ver con mis ojos.
Pero en fin, de nada valen.
Se escurren en insignificancia, como todo lo que no es acariciado por la muerte.
Ya ves, es bueno recuperar ese pedazo de metal insignificante.
Ese que nos dejo desnudos en su ausencia.
Ayer escuchaba Pequeñas Anécdotas de las instituciones,
me conmovían sus canciones.
Hoy me queda una frase que nada tiene que ver con su argumento.
"Porque yo esperé en vano que me dieras tu mano"...
Y puedo escuchar la historia de aquel día que compraste ese disco.
No e puede esperar nada más, si soy una extraña en territorio donde siempre se ven enemigos,
de esos idiotas que extrañan,
aunque el deseo de encontrarte sea tan real y posible.
No estoy muerta, no. Y no espero que nadie lo esté.
Soy tan real como todo lo que dí, tan honesta como tu dolor.
Mis palabras retrocedieron 1900 caracteres,
lo cual no es incierto en medio de la ceguera, la sordera y la indiferencia.
Una mirada como de película de terror, y la sonrisa mas linda del mundo.
Mejor me despido, como siempre los domingos son extraños,
pero los lunes cuando hay batallas que dar, son el suicidio del dolor.

Clara Liz

16/10/13

saliendo a buscarte

Escribías, sentada frente a esa notebook ya un poco vieja y mañosa con su mouse, era para un periódico que esta resurgiendo y era algo importante, era sobre unos cortes de calle de estos días movidos, te alcance una lagrima casi hirviendo sabia que tardaría en tomarla, te mire como siempre y tu infaltable “gracias amor”. Te deje seguir, mientras el humo de tu cigarro dibujaba figuras extrañas con las que me entretenía, el cenicero rebalsaba de colillas ya rotas y la tele siempre de fondo. Estaba exhausto dia largo el de hoy necesitabas un simple tinto y un poco de nada. Por esos días me gustaba mirar el pasado en la memoria, algo nuevo venia, pasaban esas cosas que siempre esperaste, estábamos al asecho y casi ocultos de algún polizón, ella seguía escribiendo y la contemplaba, me gustaba mirarla en el tiempo como sabiendo que era real lo irreal, le echaba en cara entre risas lo cuanto que tardo en ponerse en darle bola a su oficio de periodistas, la conocí cuando recién empezaba sus estudios, pero todavía eran tiempos donde lo urgente le ganaban a lo importante, donde los miedos del error, y las obsesiones de la perfección era más que la audacia y la acción imperfecta de la cual tanto aprendíamos en el dia oscuro, las noches de escapes buscando el fin del arco iris.
Era un departamento pobre, con lo que había en esas épocas, siempre cocinaba como era de costumbre, era mi lugar por las noches, me relajaba y gustaba verla llegar hablando mil cosas en el teléfono, con papeles que todavía usabas en tu nostalgia contra la modernidad. Siempre me pedias la tortilla de papas que con la receta de mi abuela difunta te conquiste a vos y tu mama una vez en tu viejo hogar. Seguías siendo maniática con la cama, el orden y esas cosas, yo creo que ya las había asimilado y ni me metía, solo me reía a veces para que te enojaras.
Los años nos había dejado asimilar nuestras manías y costumbres, pero todavía estábamos lejos de la rutina en esos días un poco grises de fugas, escondites y miedos, los ritmos de la vida era con taquicardias, soñábamos a diario y así vivíamos, habíamos podido recuperar esa frescura que habíamos perdido en los días de perros, siempre te contaba lo mismo, y como la había perdido y como le habían dicho, también los sobresaltos no nos dejaban ser rutinarios a diario, pero nos gustaba tener nuestros rituales de viejos, el diario de los domingos, los brazos enterrados por las noches y el beso al dormir. Si era rutinario también, pero era distinto, alegre, pasional, nos reinventábamos en cada esquina, había eternidad, nos caíamos pero la mano del otra levantaba al caído, paseábamos por nuestros cuerpos con el ardor de la primera mañana donde mostramos nuestras pieles, no éramos idealistas, algo siempre había, no lo sé, pero era eterno, era profundo, había calado hondo, dejamos marcas, cicatrices de esas que cuelgan en las cruces de la cotidianeidad.
Todavía te miraba y caí rendido, te escribía sin prisa versos y poemas de colores en tu vientre y las nalgas, podía enfrentarme al mundo con mis gritos, con oratoria y verborragia, podía ser cruel y dañino, pero caí, rodaba en tus pies y tu miel en la mirada. Soñaba por las noches en ser tu guardián de tus labios, reíamos mientras jugábamos en nuestros cuerpos después del placer. El hábito en las grandes pasiones seguía vivo, y nos miraba de reojo, no había demasía en esas paredes que transpiraban de la humedad y amor.
Hoy me levante así, “perdón si me vez lagrimear, los recuerdos me han hecho mal” canta el polaco en esta pieza desierta de algodón y caricias, veo como el tiempo sirvió para que la lluvia y el sol hagan los suyo con las plantas y sirvan para eso, para crecer.  No sé donde estarás, el miedo al abandono me paralizo por las noches, todavía tengo tu retrato un poco opaco por los años, la mala impresión y el humo de este cigarro, pero me deja ver tus pómulos frente a los míos, la declaración de amor entre llantos con el miedo que tenias al perderlo todo en esa tarde de acha y la vía, el verte cuando te dije que te amaba por primera vez, el mensaje del noviazgo. Sentí tu pecho al llorar lleno de miedos del pasado, cuando temblaba y me contemplabas.
Hoy me levante, me golpee y así Salí a buscarte…

benjamin

14/10/13

Como un poeta de 1900

los lunes suelen ser el homicidio del domingo. un día para escuchar Pink Floyd y sentirse contento de ser sobreviviente del mundo de lo racional. Así vamos aguardando nudos en el estomago, a veces ni estando detrás de la luna uno puede esconder algunas cosas. Entendí la vida a los seis años, cuando vi que lo único que realmente aleja a las personas es la muerte. A los ocho entendí que el dolor era algo que también se sentía en el cuerpo, en las vísceras. Año tras año la experiencia volvió duras las capas de la piel, hasta un día una armadura brota por debajo de mis uñas, de mis cejas, de mis pestañas.Nunca necesite quitarla de mi, excepto para oír alguna canción, escribir alguna poesía, apreciar alguna dibujo o pintura, siempre después de ese instante volvía a crecer.Hoy veo mas excepciones, que nunca salieron bien. No todo desata nudos en el pecho y las pupilas. Aprendí que ser niña y luego mujer era un camino donde no solo necesitaba armadura, sino armas. Y ya me ves, hoy lunes sin armas ni armaduras, solo piel y sangre. A veces duele o inquieta. Mañana guardare algunos recuerdos y estaré orgullosa de mi honesto desarme.Mi camino como siempre es solo llevar mi alma a que arda en las calles. Un gusto oír sus canciones. Le dejo un pedazo de chapa metálica, empobrecida. Que algo aprendió. A resistir. Ya volverá a crecer.

Clara Liz

10/10/13

sin sonar


Se presentara tu desdicha, 
Solo ante algún mal recuerdo
Dejaras de vivir del vino 
Y será todo vinagre.
Los azulejos se alejaran de tus ojos,
Derrotaras tus mentiras
Con caricias de brazos largos
Que no te aprietan
Envolverás las canciones
En las fotos sin papel,
Recordaras con desprecio en tu sonrisa, 
Anhelaras el grueso de la voz
Que ya no recordas
Te reirás al saber de ese reencuentro, 
Que no existía ni existirá.
No llamaras, ni gritaras, 
Te vas a ir, se desvanecerá de tu mente
Sera un juego de niños
Un paso por la mediocridad
Que supiste despechar.
Seguirás sin llamar...
Y se desvanecera de tu piel, 
No encontraras el lugar que nadie encontraba
Y todo también pasara
Ni el suspiro tendras
El numero para llamar ya no lo tenes
Y ya nunca recordaras
Sera brisa en el desierto
Papel desecho donde escribo este poema
En el basurero de tu memoria

benjamin


7/10/13

recuerdos..

Y las golondrinas no aúllan
Mientras tu ropa se desvanece en la pared.
Mi sombra no te corre,
Y a las lunas no las encuentro sin tu pecho.
Anoche te volví a soñar sin querer dormir,
Cuando el miedo volvió al despertar
Como la ausencia en mi caminar.
Ya no recordare tu voz en mis ojos,
Ni mis ojos saben mirar sin tus brazos
Las gotas saladas están hoy aquí
Chorreando estas piernas cruzadas
El plomo se hace tiempo.
La pasión un viejo recuerdo,
La carta ya no reaparece en estos minutos
El abandono invade este vaso sin soda
Con los tormentos a los que tantos temo,
Tu pelo ya no se funde en mi cuello.
Olvidaras el dolor y la angustia
Caminaras con tu alma encendida,
Sin páginas escritas.
Me iré con el miedo,
El miedo del olvido a ningún lado
Llorare sin ver y sin decir
Morderé tu libertad sin filo,
Lameré los recuerdos sin sal
Me rendiré al perder la eternidad
Me abrazare al vació,
Los reinventare para matar los miedos
Ya no será de a dos como dije y vos elegiste.
Tirare mas tierra adentro donde no se ve y sobreviviré
Oleré tu piel en las mañanas de otras camas prestadas,
Me odiare varios lustros
Y entre piedras coloradas me quedare
donde tirare las flores marchitas que nunca te quise dar
Y las espinas se clavaran en mis pies si logro levantar.

Benjamín